¿Cómo lograr el éxito académico de mi hijo con hiperactividad?
¿Sospechas que tienes un hijo hiperactivo? ¿Tienes miedo de que no pueda encajar en su escuela, o que nunca logre obtener buenas notas? Afortunadamente a día de hoy sabemos mucho más que antes acerca de la hiperactividad. En el siguiente artículo te contaremos más sobre ella y te daremos algunos consejos para apoyar a tu hijo a triunfar en la escuela y en la vida.
¿Qué es eso que llamamos hiperactividad?
Antes que nada, comencemos aclarando que no se trata simplemente de una característica de niños mal portados, como durante muchos años se creyó, sino de un trastorno de la conducta que debe ser diagnosticado y atendido de manera profesional. Su nombre correcto es el de “Trastorno por déficit de atención e hiperactividad”, conocido también por sus siglas: TDAH. El trastorno, como todos ellos, es multifactorial y puede identificarse por algunos indicadores tales como
· Dificultad para mantener atención
· Necesidad de estar en movimiento y realizando distintas tareas
· Acciones compulsivas
· Bajo rendimiento escolar
Después de hacer una evaluación del usuario y en caso de confirmar el diagnóstico, podemos hablar de tres subtipos de TDAH:
· Falta de atención predominante.
· Conducta hiperactiva/impulsiva predominante.
· Combinado. Esta es una mezcla de síntomas de falta de atención y síntomas de hiperactividad/impulsividad.
Superando la frustración
A menudo, tanto niños con TDAH, como padres y educadores se pueden sentir frustrados al padecer o tratar con pacientes con el trastorno. Esto es normal, pero no significa, de ninguna manera, que sea un destino, sino a menudo es un síntoma de un mal entendimiento de la condición, pues usualmente fue asociada a mal comportamiento, desinterés o insolencia.
Es por ello que es conveniente establecer, en primer lugar, un diagnóstico certero que ayude a los padres a conocer las características específicas del trastorno de su hijo, acompañado de una escuela con la capacidad de acompañar al usuario, a través de un departamento psicopedagógico fuerte, y docentes preparados pedagógicamente para hacer frente a retos actitudinales.
Además, es importante tener un programa sólido de regulación emocional que pueda ayudar a los pequeños con TDAH. Es el caso del programa de bienestar del Colegio Sn. Ángel, que a través de nuestra Coach de Desarrollo Humano y una serie de herramientas como el énfasis en mindfulness, apoya a los usuarios a adquirir herramientas que coadyuven en su integración académica desde los niveles más básicos.
Familia y escuela: una combinación ganadora
Además de lo ya mencionado, conviene establecer una sinergia entre educadores, autoridades educativas y familiares del niño con TDAH para garantizar no sólo la inclusión del pequeño, sino la potenciación de sus cualidades individuales. Esto incluye:
· La actualización constante del diagnóstico profesional
· La comunicación permanente entre el docente y el familiar a cargo
· El diagnóstico de sus fortalezas a través de evaluaciones de inteligencias múltiples
· El establecimiento de acciones específicas para la atención del pequeño
· El enfoque en la disciplina de manera coordinada, privilegiando el entendimiento sobre el castigo
· El trabajo dentro del aula en educación emocional y social
· Actividades lúdicas y físicas
Con el trabajo coordinado entre escuela y familia, se garantizará la mejor educación para los niños con hiperactividad
Redacción Sn Ángel
