Anís
Una planta con propiedades, beneficios y valor nutricional la podemos encontrar con al anís, una especie comúnmente utilizada como infusión y/o potenciador de aromas y sabores.
La planta de anís suele cultivarse entre los meses de invierno y consigue desarrollarse de mejor manera cuando se expone directamente al sol, pudiendo soportar largas jornadas de contacto al sol por lo que ser planta en espacios directos al calor solar no representa ningún problema.
Aunque puede ser plantada y cultivada en cualquier tipo de suelo (húmedo, secos, arenosos, ligeros) éste necesita ser rico en minerales y materia orgánica para un exitoso crecimiento, así como el constante abono de la tierra y un regado equilibrado de poca agua dos o tres vece por semana.
Como parte de sus beneficios a la salud, ésta contiene calcio, fósforo, zinc, magnesio y potasio, minerales que ayudan a mejorar el rendimiento muscular y refuerzan los huesos. Tomado con finalidades medicinales, un té de esta planta funge como un buen diurético, así como estimular la producción de leche materna.
Por si fuera poco, la planta de anís agrega un valor en el mejoramiento del sistema digestivo, aporta beneficios al sistema nervioso y mejora el sistema respiratorio.
