Como nunca antes, el tiempo que utilizamos para navegar en internet ha crecido ocupando buena parte de nuestro día, provocando una creciente preocupación en la seguridad cibernética. Y es que la paternidad se enfrenta a riesgos distintos a los que tuvieron generaciones anteriores, pues nuestros hijos viven en dos mundos, el mundo de lo real y el mundo de la virtualidad que, si no ponemos el debido cuidado, puede acarrear consecuencias indeseables. Sin embargo, haciendo uso de las recomendaciones de los expertos haremos que el mundo digital sea nuestro aliado, y no un enemigo.
Seguridad en los dispositivos
Aunque la puesta en marcha de la inserción tecnológica en la educación había llegado ya al punto de no retorno, la pandemia de COVID 19 aceleró este proceso, enviando a millones de niños y adolescentes al mundo de lo virtual. A través de computadoras, celulares o tabletas, los chicos se conectan a diario a una red casi infinita de posibilidades, información e interacciones, lo que brinda un universo inédito de conocimientos, pero también nos enfrenta a nuevos riesgos.
Un primer paso rumbo al blindaje de nuestros hijos es tener control sobre los dispositivos que utilizan. Es pertinente que el dispositivo familiar dedicado a la educación sólo contenga aplicaciones y acceso a contenido protegido. Esto es beneficioso porque, por un lado, eliminará riesgos innecesarios a la hora de navegar, y por otra parte ayudará a los estudiantes a acceder a fuentes de conocimiento confiables.
En el caso de instituciones como el Colegio Sn Ángel, esto se logra a través de programas diseñados por expertos en pedagogía, que incluyen el trabajo en una tableta preestablecida y controlada por el centro educativo, bloqueando sitios de riesgo y trabajando de forma conjunta con profesores y padres de familia.
Un control similar se puede dar desde casa a los dispositivos personales, haciendo uso de programas específicos de control parental, disponibles en prácticamente todas las plataformas. Estos pueden descargarse directamente a computadoras, celulares y otros dispositivos.
Confianza con control: recomendaciones para padres
A pesar de lo anterior, existen una serie de riesgos propios de la interacción social de los niños y adolescentes. Estos pueden tratarse desde ser víctimas de ciberbullying, hasta el riesgo físico y financiero. La base para la experiencia de nuestros hijos en la red debe ser la confianza, pero esta no se traduce en una navegación libre, sino en otorgar a nuestros menores la seguridad para informarnos de cualquier situación anormal o de riesgo.
El Distrito Escolar Independiente de Houston elaboró el siguiente listado de recomendaciones de seguridad informática, mismas que pueden ser adaptadas a la realidad mexicana
· Ubicar la computadora en un lugar común de la casa donde siempre haya movimiento.
· Establecer restricciones para el tipo de sitios de Internet que los niños pueden visitar y limitar el tiempo de uso de la tecnología.
· Preparar un acuerdo familiar para el uso de la tecnología.
· Tener presente que la tecnología de Internet es móvil; es preciso vigilar el uso de teléfonos celulares, consolas de juego y computadoras portátiles.
· Navegar por Internet con sus hijos para que ellos le muestren lo que les gusta hacer cuando están en línea.
· Saber quién se conecta con sus hijos en línea y establecer reglas para el uso de las redes sociales, la mensajería instantánea, el correo electrónico, los juegos por Internet y el uso de cámaras conectadas a Internet.
· Dialogar continuamente con sus hijos sobre la seguridad en línea.
Además, sugiere la creación de un acuerdo familiar para el uso de la tecnología, que consiste en una serie de reglas establecidas en conjunto con el núcleo familiar. Entre las preguntas que sugiere formularse están las siguientes:
· ¿Cuántas horas al día pueden pasar ocupados en la computadora, tableta, o jugando juegos de video?
· ¿Está permitido el uso de los medios sociales? ¿Cuáles?
· El uso de la computadora portátil, ¿está permitido a puerta cerrada, o los niños deben usarla en áreas comunes de la casa donde los demás puedan verlos?
· ¿Se les permite a los niños que tengan los dispositivos móviles en su dormitorio toda la noche?
· ¿Hay sitios de Internet en particular que los niños no tienen permiso para visitar?
· ¿Qué información se puede compartir en línea y cuál no?
Como se puede observar, la respuesta no es universal, sino familiar. Sin embargo, lo anterior es una excelente guía para blindar la experiencia de nuestros pequeños en la educación virtual, y sobre todo, en su vida digital que se seguirá expandiendo.
Acuda a los expertos
El Colegio Sn Ángel brinda un fuerte acompañamiento ante cualquier duda relacionada con la seguridad digital, sea a través del departamento psicopedagógico, de la academia de tecnología, innovación y de nuestro personal docente y directivo. Para profundizar más en el tema puede contactarnos a través de nuestras redes sociales.
Redacción Sn. Ángel
